domingo, 28 de julio de 2013

DÍA 11... Y FINAL

¿Cómo os suenan las expresiones "dentro del plan" y "por debajo del presupuesto"?... Pues a mí me suenan a gloria, porque así hemos acabado la peli: dentro del plan de 12 días (de hecho, un día menos) y por debajo del presupuesto.

Hoy ha sido el mejor día de todo el rodaje: plácido, tranquilo, sin un calor mortal... Ha habido cambio total de aires: un reparto completamente distinto, todo con luz natural e incluso en exteriores. Todo ha salido perfecto (salvo esos malditos vecinos que solo hablaban cuando yo decía "acción").

El lío que hemos montado en plena calle, que la hemos cortado y todo.

Maravillosos Víctor, Inés, Gonzalo y Cristina. Pero sobre todo Lucía y Sara, que interpretan a Alba y Ruxandra de niñas... y lo han clavado (¡cuánto talento tienen estas niñas, por dios! ¡qué lejos van a llegar!... y cuando sean muy famosas, yo diré: "¡Eh, salían en una película mía!").

En fin, ya hay que empezar con la postproducción, mi parte favorita del proceso (¡cómo disfruto montando!). En unos pocos meses, habrá película y no solo un montón de planos sueltos.

Seguiremos informando.

lunes, 22 de julio de 2013

DÍAS 9 Y 10... ÚLTIMAS JORNADAS EN LA CASA



De nuevo perdón por no publicar en su momento, pero el agotamiento pudo conmigo ayer... de hecho, ahora mismo estaba a puntito de acostarme, pero he decidido escribir algo antes, por eso de la disciplina y el respeto a los que leáis este blog.

Este fin de semana hemos terminado en LA CASA.

Sí, ha sido uno de los meses más duros de mi vida... Bueno, en realidad solo 8 días, porque solo grabábamos en fines de semana... ¡¡JODER, 8 DÍAS!! ¡¡HEMOS RODADO EL 90% DE LA PELI EN 8 DÍAS!! No sé ni cómo seguimos vivos... ¡Pero lo seguimos! Solo queda una jornada, y el rodaje principal habrá acabado. A parte de lo que rodemos este domingo, solo quedan algunos planos de fx e insertos (bueno, y más cosillas que irán surgiendo mientras montemos), lo que viene siendo una segunda unidad.

Pero lo que seguro que os interesa es saber cómo han ido estos dos últimos días: pues muy bien... muy duros, como todos los de la casa, pero muy bien. Hemos rodado escenas preciosas, divertidas y aterradoras (sí, por fin estoy seguro de que hay escenas de miedo DE VERDAD en la película). También ha sido un fin de semana triste, porque, con la casa, han terminado Maya, Lone, Chema, Rafa, Cova, Nüll y Ruxandra... Lo he pasado tan bien rodando con ellos. Son maravillosos a tantos niveles. Ha sido una experiencia tan increíble tener tal cantidad de talento alrededor de esa mesa. Ahora son mi familia... y ya los echo mucho de menos.

Solo me queda añadir una pequeña reflexión personal... Hay una cosa que debería haber aprendido ya hace mucho tiempo, pero aún me sigue pasando: ruedo con mis amigos (hay personas en el equipo que son de lo más importante que hay en mi vida), así que tengo que aprender a diferenciar lo personal de lo profesional. Lo que pasa en el rodaje, se queda en el rodaje. De verdad, no hay nada que no se solucione con una cerveza y un abrazo... tengo que dejar de martirizarme por esas cosas. Me han hecho sufrir mucho. Pero ya pasó...

Y lo repito: seguimos vivos.


lunes, 15 de julio de 2013

DÍAS 7 Y 8

Perdón por no haber dado cumplida cuenta del rodaje estos días, pero estaba demasiado cansado como para escribir... bueno, sigo demasiado cansado, pero he decidido hacer el esfuerzo. Este ha sido el penúltimo fin de semana en la casa, y ha sido tremendamente productivo: en tres horas menos de lo previsto, hemos sacado un plan de rodaje que habría hecho poner el grito en el cielo a Roger Corman.

Jorge enrolla un cable mientras Gon habla con Lone, Maya y Null...
en vez de colocar los focos. Al fondo, Cova y Rux tratan de
solucionar el problema con los pendientes.

Hemos rodado algunas de las escenas más divertidas y más tiernas de la peli (es curioso, soy consciente de que la comedia y el drama funcionan francamente bien... pero no tengo ni idea de cómo están quedando las escenas de miedo). Estoy especialmente feliz con dos momentos: un emotivo diálogo entre Lone y Ruxandra, y un monólogo maravilloso de Rafa... de Rafa también nos gustó mucho el "¡Me cago en mi vida!". Coño, Rafa tiene un momento cumbre cada semana.

El sábado, Alba terminó la peli. Y es muy curiosa la sensación que tengo cuando los actores comienzan a acabar y a no volver. Poco a poco, te vas quedando solo, hasta que al final eres tú y todo el material... Bueno, eso quiere decir que cada vez va quedando menos. Y, la verdad, es que tengo muchas ganas de acabar. Este rodaje me está minando mucho: el domingo, por ejemplo, estaba un poco pocho, supongo que de puro cansancio y estrés. El caso es que era incapaz de encajar nada y empecé a tomarme todo por lo personal. John Millius decía que "el sufrimiento es pasajero, la película es para siempre"... a lo que yo añado que "ninguna película es tan importante como para destruir lo que hay entre las personas", así que no lo voy a permitir.

Y tras este momento de filosofía y desahogo, solo decir que creo que es mi mejor peli y que aún me quedan energías para acabar el rodaje... vamos, que nadie se asuste.


domingo, 7 de julio de 2013

DÍA 6

Si ayer fue uno de los días de rodaje más agobiantes que he vivido en mi vida, hoy ha sido de los mejores... a pesar de todo. Me parece increíble que hayamos sacado adelante el plan de rodaje que teníamos para hoy. Grandes carcajadas cuando Rafa ha destruido el foco... o la escena con Montse, Pedro y Miguel Ángel... o el "pues vaya" de Maya. Pero mi momento favorito de hoy ha sido cuando todo el equipo ha sido consciente de cuan bizarra es la película que estamos rodando.

En fin, un día duro, pero muy productivo. Y encima bonito.

"Pero... ¡¿Por qué?!"

En fin, poco más que añadir, salvo que espero que todos los que quedan sean igual (aunque un pelín más corto).

sábado, 6 de julio de 2013

DÍA 5... EL INFIERNO

Puede sonar a que intento hacer el blog más interesante, por aquello de que no sea todo "¡Qué maravilloso es mi equipo!" (que lo es), o "¡Nunca he estado en un rodaje más fantástico!". Ya sabéis, contar aventuritas para que todo parezca menos monótono y que digáis "Jo, las cosas que pasan en un rodaje". Pero no, es la pura verdad.

Hoy he estado en el INFIERNO... y he vuelto de él.

Me explico: el clímax de la historia sucede en una especie de dimensión infernal, donde se desata el caos y el horror (lo mismo esto es un spóiler... no estoy nada lúcido). Así que, gracias a la increíble pericia e inventiva de los departamentos de arte y cámara (y una absurda idea mía, que parecía abocada al fracaso, pero que al final ha funcionado...¡y muy bien!), hemos conseguido que, efectivamente, nuestros protas hayan pasado unas horas en un infierno la mar de convincente. Pero si eso fuera todo, no habría nada que contar: hay que conseguir una atmósfera, una decoración y unos efectos por exigencias del guión, así que se va y se hace, ¿ok? No, eso no es lo único que ha pasado hoy. 

Hoy hemos rodado en el Infierno real: Resulta que en Madrid, ahora mismo, estamos pasando por una ola de calor sahariana que nos está poniendo a 40º a la sombra. Súmale a eso unos cuantos focos, todas las persianas cerradas y unas 20 personas a tu alrededor... y comienzas a notar como la atmósfera se enrarece. Yo creo que no lo he pasado peor en mi vida. He estado en un Infierno muy real al que he arrastrado a todo mi equipo: Cada gota de sudor ajena, cada vahído (que los ha habido), cada malentendido, cada pequeño problema... todo me ha ido afectando y minando, hasta el borde del colapso.

Es que no quiero que sufran, que lo pasen mal. Quiero que estén a gusto en este monumental jaleo en el que los he metido... y hoy han sufrido y lo han pasado mal, ya lo creo... Pero eso no se nota en su trabajo. Se esfuerzan más que yo. Me ayudan y me apoyan cuando me bloqueo o me da el vahído a mí. Si yo estuviera en su lugar, probablemente habría causado muchos más problemas y hubiera sido mucho más borde y menos resolutivo de lo que están siendo ellos. No me merezco este equipo (parece que al final esto está siendo una de esas entradas diciendo "¡Qué maravilloso es mi equipo!", pero un poco de aquella manera...), porque ellos me ayudan a seguir adelante, a que mañana me ponga en pie otra vez a las 7 am y vuelva a ir al rodaje con la intención de seguir luchando por sacar está película lo mejor posible.

Sí, porque lo que está quedando registrado en cámara es magnífico. Y sé que dentro de un mes, cuando me ponga a montar, todo esta vorágine habrá quedado atrás y disfrutaré como un loco dándole la forma definitiva. Y también sé que, dentro de 6 meses o así, cuando la peli esté completamente acabada, habré olvidado como fueron estos días en el infierno y ya estaré pensando en la próxima... si mi equipo no hace algo por evitarlo.


Mario Parra, el guionista, aprovecha un breve momento de paz
para intentar hacerse con los mandos de la peli.