jueves, 29 de agosto de 2013

LONE

Esto es una carta de amor a una de mis actrices. No quiere decir que las demás no se merezcan una... o los actores, pero es que ella es especial (y sé que el resto del reparto va a saber perdonarme el trato de favor).

Lone Fleming

Descubrí a Lone Fleming, como tantos otros, cuando vi "La Noche del Terror Ciego"... Tendría, no sé, 15 años como mucho: con esa edad, ¿cómo no me iba a convertir en fan de Lone?... ¡Maldita sea, es pelirroja! Bueno, pasan los años, y uno se pone a hacer el canelo con la cámara, rueda tres largos y quiere sacar adelante el cuarto. Así que no se me ocurre otra cosa que liar a Juanjo Ramírez (gran guionista y gran amigo) y escribir un remake/secuela/cosa rara de "El Más Allá", de Lucio Fulci: "El Otro Lado" ("The Other Side")... y como buena secuela (o remake... o cosa rara), teníamos que ir más allá de "El Más Allá".

Y ya lo creo que fuimos más allá... como tres pueblos más allá.



Gracias a Rafa Casette, conseguí el contacto con Lone y le envié el guión de marras. Le ofrecíamos un papelito pequeño, con una escena, pero estábamos dispuestos a ampliarlo si ella aceptaba participar. Lone se mostró encantada... hasta que leyó el guión. Aquello era demasiado para ella (y eso que su personaje era de los pocos que no sufría una muerte atroz). Muy amablemente tuvo que rechazar la oferta, pero la semilla estaba plantada.

Tras unos meses trabajando en "The Other Side", llegué a la conclusión de que necesitábamos muuuucho más dinero del que podíamos juntar en ese momento, así que había que moverse a otro proyecto, uno mucho más accesible. Rebuscando por entre las viejas ideas, encontré una que llevaba rondándome la cabeza un montón de tiempo: una falsa médium (o no tan falsa), su hermana timadora, una sesión, un invitado no deseado... Había estado trabajando en ese argumento con Juanjo para escribir un cortometraje que formara parte de una película de episodios codirigida con él y Norberto Ramos del Val, pero la cosa no cuajó. Así que llamé a Mario Parra (otro gran guionista y gran amigo) y le propuse que escribiera el guión de "La Mujer que hablaba con los Muertos", pero en formato largometraje. Y lo hizo.

Así fue como nació Blanca, una encantadora viuda que esconde más de un misterio y que trata de resolverlos contactando con los espíritus... Y Lone entró de nuevo en la ecuación: volví a mandarle un guión, ella volvió a mostrarse encanta, solo que esta vez dijo que sí. A diferencia del personaje que le ofrecimos con "The Other Side", este no era un cameo, era uno de los principales, con páginas y páginas de texto, todo un desafío, pero todos estábamos dispuestos a correrlo.

Maya Reyes y Lone Fleming en el rodaje

Por fin conocí a Lone en persona (hasta ahora todo el contacto había sido via mail o teléfono)... ¡Que maravilla de mujer! ¡Todo cariño y candor! ¡Amor a primera vista! Y al resto del equipo le pasó igual: todos nos enamoramos de ella. Se volcó con toda su alma en el proyecto (teníais que ver como se puso a recaudar pasta cuando pusimos en marcha el crowdfunding). Durante los ensayos, Lone parecía nerviosa: le preocupaba que su acento pudiera entorpecer la fluidez del texto. Me hizo mucha gracia ver su reacción cuando le expliqué que rodábamos en digital y que podríamos repetir infinitas vez sin gastar ni un euro de más, cai como una niña con zapatos nuevos... es que ella es Blanca.

El rodaje fue muy duro (ya lo he contado mil veces), pero Lone NUNCA puso una mala cara, ni se quejó del calor, ni de las jornadas eternas (fue la primera que dijo que, si había que venir antes al rodaje, se venía)... incluso me daba masajes en la espalda entre tomas cuando el peso de la cámara hacía que me dieran calambres (¡Lone Fleming me ha dado masajes en la espalda! ¡Chupaos esa!).

Ayer estuve montando uno de sus monologos... y al igual que en el rodaje, se me saltaban las lágrimas. Estoy tan feliz de haberle dado este papelón a Lone Fleming. Estoy tan feliz de que ella lo aceptara. Estoy tan feliz de que lo hiciera tan bien.

Estoy tan feliz...

¡Te quiero Lone!

sábado, 24 de agosto de 2013

21 MINUTOS, ACTORES MARAVILLOSOS Y DÍAS DE CINE

¡Qué abandonado tengo esto, por favor!

Bueno, una vez terminado el rodaje, dejé reposar el material un par de semanitas para intentar desconectar antes de ponerme a montar. Una vez pasado ese tiempo, la primera sorpresa que me llevé al sentarme ante el ordenador fue la ingente cantidad de brutos con la que me enfrento: más de 1,5 TB... casi un 50% más de lo que tenía para montar "Buenas noches, dijo la Srta. Pájaro". Una barbaridad, vamos. En esas dos semanas que dejé reposar todo el tinglado, no podía desconectar del todo mi cerebro (obviamente), así que no pararba de pensar en las múltiples posibilidades de montaje para las diferentes escenas. Lo curioso era que yo solo tenía bien claro lo que había grabado con mi cámara... sabía más o menos lo que grababan los otros dos operadores, pero no estaba del todo seguro (las maravillas de no usar monitor durante el rodaje), así que montaba en mi cabeza las escenas solo con mis planos, y la cosa no quedaba mal, aunque a veces no terminaba de cuajar. Para poder solucionar esos "problemillas", se me ocurrieron un montón de macarradas visuales para darle coherencia al montaje (a la par de hacer más divertida la película). Pero, claro, esos problemas solo existían porque "montaba mentalmente" con el material de una cámara: ahora lo estoy haciendo con el de las tres... aunque sigo poniendo en práctica las macarradas anteriormente mencionadas. Vamos, que me lo estoy pasando bien montando la peli: ya llevo 21 minutos (como el primer acto... o el primer punto de giro... o ni idea... es una película muy rara). ¿Y por qué dejé reposar todo dos semanas? Si, en una semana que llevo, ya he editado 21 minutos, en esas dos semanas podría casi haberme pulido 40 minutos más (soy un genio de las mates, ¿a que sí?). Bueno es que a mí me gusta dejar pasar un poco de tiempo entre el rodaje y el montaje: lo ideal es olvidar por completo que estabas en el set y lo mucho que te costó rodar tal o cual cosa: si hay que cortar un plano, hay que cortarlo, nada de encariñarse de un fotograma porque fue un triunfo sacarlo... una película es mucho más que un montón de planos detrás de otro. La gente no tiene que percibir el corte: para ellos, todo tiene que ser un enorme plano secuencia. Ser montador es ser cruel con el material... brutalmente cruel. Si no, no hay peli.

Ahora, cuando miro esta imagen, ya no me acuerdo del agobio, ni del calor, ni del caos,
solo veo un fotograma al que meterle la tijera

La segunda sorpresa (que no lo es tanto, porque ya sabía con quién trabajaba) es lo maravillosos que son mis actores. Uno nunca es completamente consciente de todo lo bueno que es el trabajo de un actor hasta que no vas encajando las piezas del puzle: según colocas un plano detrás de otro, vas viendo como todo toma la forma correcta, como el personaje crece ante tus ojos... a veces, incluso más de lo que esperabas. En este caso, los primeros 10 minutos de peli tienen un tono muy diferente al que pensé que iban a tener. Uno mucho mejor. Y eso ha sido gracias a Alba y a Ruxandra, que creían en sus personajes... y que los querían con locura: han sabido insuflarles más vida y han hecho a las hermanas Castaño mucho más entrañables, y eso solo se consigue con AMOR. Pero no solo ellas, Cova, por ejemplo, ha conseguido "quedarse con la peli" con la primera palabra que dice su personaje (¡y que no parpadea ni una vez, la jodía!). Rafa ha creado a un bastardo maravilloso al que te encanta odiar. Null y Chema son la pareja más deliciosamente (im)perfecta de la historia. Y Maya y Lone, que derrochan ternura por todos los poros. Los personajes ya está ahí... y son mejores de lo que pensaba que iban a ser (repito lo que decía al principio de este párrafo: ya sabía con quién trabajaba, así que esperaba cosas muy buenas).

Rux y Alba preparadas para la acción (y Pedro también)

Y la tercera sorpresa es que salí en Días de Cine (y "La Mujer que hablaba con los Muertos" también). Bueno, no tiene que ver con el montaje, pero me hace ilusión. Aquí tenéis el reportajillo, por si alguien quiere verlo: